Son considerados una de las frutas con mayor poder antioxidante, sin embargo, sus beneficios van más allá de solo eso. Conoce todas las propiedades que estos pequeños frutos morado oscuro tienen para tu organismo.
Se pueden consumir congeladas o deshidratadas durante todo el año, pero nada mejor que comerlas frescas y así aprovechar todos sus beneficios. Recuerda que los alimentos con los cambios de temperatura cambian o pierden algunas de sus propiedades, entre más fresca, orgánica y completa te comas una fruta o verdura, mejor. Algunas de sus acciones sobre el cuerpo es neutralizar los radicales libres y fortalecer el colágeno.
Otras áreas se ven favorecidas gracias al consumo de arándanos como:
Memoria: Su contenido en antocianina convierte a los arándanos en un poderoso revitalizador de la memoria. Además, ayuda a mejorar el aprendizaje.
Digestión: Como son buena fuente de fibra, pueden ayudar a aliviar problemas digestivos. Además, contienen pectina, lo que disminuye la velocidad de absorción intestinal y con ello disminuye la respuesta glicémica (azúcar en sangre). Esto lo hace en un alimento perfecto para personas para con resistencia a insulina, por ejemplo.
Obesidad: Son bajos en calorías y buena fuente de fibra, ambos elementos clave para hacer de los arándanos en un alimento ideal para dietas hipocalóricas que buscan perder o controlar el peso corporal.
Vista: Los arándanos también tienen incidencia en la salud vascular, permitiendo una mayor irrigación sanguínea y, en consecuencia, preservando la salud del ojo.